CONFORT EN LA TEMPESTAD
Este sábado en Munguía íbamos a
participar en nuestro primer duatlón
como grupo. Sin embargo, la meteorología aplazó nuestras intenciones a otro
evento. El organizador emitió un comunicado pocas horas antes valorando la
posibilidad de la modificación del evento si el temporal persistía por una
carrera a pie de unos 10km. Mis compañeros, aún en La Rioja decidieron
renunciar a acudir pero en mi caso había aprovechado el evento para visitar a
unos familiares que tengo en Euskadi, así que no me costó demasiado acercarme
para recibir noticias. Llovía, si pero en un principio la situación no me
parecía tan mala como para plantearse una suspensión.
Media hora de la salida se confirmó
lo esperado decretándose la suspensión del evento. La mayoría de los que allí
estábamos decidimos participar en la carrera a pie (unas 4 vueltas de unos
2,5km) que se desarrollaría en su lugar. Una situación que a mi particularmente
no me beneficiaba pero el organizador (IA Esport Event en este caso) no podía
ofrecernos otra cosa. La idea de modificar fechas creo que no era opción:
Obtener los permisos correspondientes, hallar un hueco en el calendario, forzar
a los que habíamos acudido a trasladarnos de nuevo hasta allí con lo que ello
implica…demasiados condicionantes a encajar.
Hace un mes corrimos el 10K de La
Rioja con alerta amarilla por vientos, pero lo de hoy era naranja y algo más
seria: rachas de 80km/h de casi tirarte al suelo. La carrera iba a ser una
selva…
Con viento culero se dio la salida a
la prueba y rápidamente los más fuertes empezaron a imponer su ley. Se formó un
grupo de 10unidades con algunos de los habituales dominadores del calendario
vasco (Hoss, Larruzea, Quintans…y algunos atletas puros como Iker Velasco y
Lucena que tenían una fantástica oportunidad hoy). Veía un poco temerario
sumarme con una salida y me quedé tras ellos…y en solitario. 1ºkm a 3’18” y con
10seg cedidos respecto a este grupo.
Cayó poco después un corredor del
Eibar con pinta de exhausto y pasé al 10ºlugar, ya tenía cumplido mi objetivo y
a partir de ahí me di cuenta de mi desgracia por correr sólo. Al girar, el
viento en la cara amenazaba con borrarme del mapa. ¡Y esto acababa de empezar!
La cosa es que por detrás cada vez
abría mas diferencias. Nadie parecía amenazar mi posición. En esta 2ºvuelta me
coloqué 9º y el anterior titular de la plaza tampoco hizo el mayor ademán de
seguirme…Continuando con un ritmo de crucero nada cansino vi al octavo y
delante de este el abismo mas absoluto…un mundo con respecto a los lideres.
¿Y a partir de ahí que hice? Pura
comodidad…dejé que mi predecesor me guiara en la distancia, obligándome a
esforzarme pero lo justito. Así pasaron las vueltas, los kilómetros y los
minutos. Todo seguía en esa línea. Los primeros cada vez más lejos, los
perseguidores controlados con un panorama aburridísimo y desolador.
En el último kilómetro decidí
reaccionar en buscar del 8ºpuesto y recorté los 10segundos que me separaban del
octavo puesto. No obstante, el corredor del Galdakao vio venir la jugada y
cuando ya le tenía cogido metió la directa hasta la meta.
Nada menos que 2’30” me clavó Gorka
Lucena en meta. Ya lo dicen...hay clases y clases.
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