BODY RULES
Tic-Tac.
Tic-Tac Tic-Tac. Ya podía ser la cuenta atrás a la que Pablo Iglesias aludía
cara a las próximas elecciones generales. Yo tengo un margen sensiblemente menor
para afrontar la competición que se avecinaba.Miro las agujas del reloj de la
mesilla de noche de la habitación donde pernocto en Mondragón. El tiempo avanza
inexorablemente, el reloj del teléfono móvil y la oscuridad que se cierne en el
cielo también lo confirma. No así para mis
piernas, que parecen haberse sumergido en una eterna Edad de Hielo, como dos bloques inamovibles tras la batalla
del duatlón de Logroño, aunque aun albergaba alguna esperanza de tenerlas operativas
la mañana siguiente.
Pero no…con la llegada del siguiente
amanecer las cosas continúan como están, o mas bien peor. El hormigón que
parecen cargar mis muslos se ha tornado en cemento armado y me pregunto como
voy a hacer 15km corriendo con semejante panorama. Bueno, la locura ya estaba
en marcha y en esas me planté en la salida
del Duatlón de Amorebieta.
Aunque parezca mentira, era una
suerte que este duatlón fuese de distancia más larga que los habituales (9.8km
corriendo-44kmbici-4.8kmcorriendo) porque me daría cierto margen de maniobra
para una eventual remontada en la bicicleta, donde los efectos de competir un
día antes no serían presumiblemente tan notorios.
Salgo en 2ºfila, pero con la idea de
ir dejándome caer hasta encontrar un
ritmo que muscularmente pudiera soportar. Así hago ademán de seguir a
varios duatletas hasta que consigo encontrar un grupo con un ritmo asequible
para mi. Físicamente voy en carroza pero llevo los cuádriceps al límite y en
ese maridaje ellos son como la mujer de la casa, la que tiene la última
palabra.
Desde el primer metro fui literalmente devorado por una nube de
buenos duatletas (Fotógrafa Nuria GD)
No
podía superar esa velocidad de en torno a 3’40”/km
que llevaba, muy inferior al que presumiblemente puedo llevar en un 10000. El
puesto también rondaba entre el 35-40, el peor con diferencia desde esta
temporada en duatlón, pero al menos seguía corriendo que no era poco.
Iba pidiendo a gritos que llegara la
jodida transición, donde escuché por megafonía que llegaban los primeros
corredores cuando a nosotros aun no restaba un kilómetro por delante.
¡Buff!¡Que paliza!
Llegado el deseado momento de
subirse a la bicicleta formamos un grupo
de 7duatletas con un llano de 10km previo a los dos puertos de montaña que
tendríamos que superar (Muniketas y Autzagane). Si en Logroño comentaba que
eran mas tacaños en los relevos que los que echan monedas de 1céntimo en las
colectas…aquí tuve la suerte de encontrarme un grupo bastante entregado a avanzar,
con un duatleta local (Ejejalde) que era una auténtica locomotora en el plano.
Tambiénresultó ser un buen aliado el santurziarra Dani Juarros, uno de los
mejores duatletas sobre la bici (2ºparcial en Eibar, 4º en Castro Urdiales…) y
que al igual que yo, había pagado corriendo su participación en un evento el
día anterior, en su caso los 10km de Laredo.
El buen entendimiento hizo que fuéramos cazando gente ya en el llano,
aunque conforme nos íbamos acercando el puerto el escaqueo comenzaba a aparecer
y con la lección bien aprendida del día anterior, empecé a golpear para
seleccionar el grupo.
Se notaba que no tenía unas buenas piernas en bicicleta, el esfuerzo del día
anterior, aunque menos que corriendo, también pasaba factura. El pulso no subía
igual más traté de poner un ritmo constante e ir cazando corredores en el
puerto de Autzagane que se iniciaba . Juarros y Elejalde esta vez se pusieron a
rueda más no les pedí casi relevo alguno, era el momento de darlo todo en mi
mejor terreno, un puerto largo y constante.
Tenía la sensación de ir parado,
porque este puerto lo he subido varias veces en carreras ciclistas y las
comparaciones de ritmo me parecían odiosas, sin embargo me daba para ir, muy
poco a poco, cazando participantes a los que en su mayoría también ibamos
descolgando. En el tramo final algunos ya nos iban cogiendo rueda y conformamos
un grupo de 6 que se repartía las
posiciones 19 a 24. Contando que partía del puesto 37 en la transición había
sido un avance sustancial pero la posibilidad de alcanzar a los puestos más
elevados se antojaba imposible desde donde partíamos.
Sin más novedad, bajamos y casi de
seguido encaramos la subida al siguiente puerto, Autzagane. Noto aun mas si cabe el esfuerzo acumulado
y ahora si que pido la colaboración de otros compañeros de grupo, entre los que
destacan Juarros y Loizaga, a la postre mejor sub23 del día. La paliza para
todos está resultando formidable y empezamos a bromear como en los tiempos de
ciclismo cuando hacíamos grupeta de quién nos mandaría a nosotros estar ahí…jeje.
Siguiendo a un ciclista de categoría,Juarros.Espero que volvamos a
coincidir en más duatlones y ojalá que en posiciones mas avanzadas (Fotógrafo ONA ONARI)
Sigue la recogida de cadáveres, con
la caza de 5deportistas más que hinchaban el grupo hasta 11 unidades, lo que me
hace fijar en la cabeza el objetivo de
estar entre los 20mejores en la clasificación final. En la bajada me aprovecho
de que algo de técnica ciclista me queda y en las curvas cerradas tomo segundos
que los demás me deben recortar pedaleando en las rectas, lo que me permite
relajarme y llegar más descansado a la transición, que con la paliza que a
posteriori me iban a dar igualaría un poco las fuerzas.
Salgo a la 2ºcarrera saliendo
lanzado de boxes solo superado en el grupo por Iker Plagaro, un gran
especialista corriendo que sufrió en la bici. Seguía con esa mala ecuación de
tener mucho mejor el pulso que los músculos pero ya de forma descarada. Me
sentía casi arrastrar por las calles centrales de esta localidad vizcaína.
Enseguida llega a mi Juarros, mi
alter ego durante todo este duatlón de Amorebieta y al que intenté tomar como
referencia. Vamos todo el rato entre el 17º-20º y mi objetivo parece asegurado.
Con un grandísimo sufrimiento sigo su zancada y a falta de 500mts el y otro
corredor sprintan cara a meta. Complaciente y bastante fatigado no me meto en
el fregado contando que voy a conseguir mi meta, pero cual es mi sorpresa que
resulto ser el 21º en la clasificación final… y es que debí haber contando mal
y otros dos corredores que había por delante alteraron mis erróneas matemáticas.
Bueno, entre el 20 y el 21 tampoco es que haya mucha diferencia…¡pero quedaba
más bonito!
En meta me comí tal cantidad de
pastelitos que temo haber descuadrado las cuentas de la organización, magnífica
por cierto. Por sólo 3EUROS han sido
capaces de organizar un duatlón de más de 2horas de duración. Es cuando uno
se pregunta cuando pagas más de 20€ por participar en otros…¿dónde se va la
pasta?Bastante evidente…aunque con la ley de oferta y demanda es totalmente
válido mientras les cunda. Eso sí, creo que los duatletas no dejemos nunca que
desaparezca este duatlón, nos sería un poco contraproducente.
Sólo se les puede achacar el exigente tiempo de corte en la bicicleta que provocó que 60 de los 200participantes no pudieran llegar a meta, pero entiendo que ahí la opinión de las autoridades de tráfico tendrá mucho que ver. En toda competición hay que procurar que la mayor cantidad posible de personas alcance la meta, de lo contrario es muy posible que no quieran repetir y se trata de sumar adeptos a este deporte, no de perderlos...
En Amorebieta no tuve acompañantes,
así que aproveché para departir un poco con otros eventistas que me siguieron
confirmando lo ya apuntado. Gente muy
maja y sana…¡Me encanta este mundillo!
En cuanto a lo meramente deportivo
conclusión…lo de competir 2días seguidos aun como que no. Tengo que dejar que
mi cuerpo se haga definitivamente a correr y ese proceso tiene visos de durar
un tiempo todavía. Lo dejo para los pros de la matería como el alavés Diego
García…quién corrió dos seguidos sin despeinarse. ¡Buen espejo al que mirarse!
Si ya el domingo me costó ponerme en
funcionamiento, el lunes no me podía ni levantar de la cama, y el martes casi
que lo mismo. Comprendí que el cuerpo me
estaba poniendo las luces de emergencia y que paraba o me paraba él…así que
esta semana muy relajadita, haciendo novillos 3días y sin competir por primera
vez en mucho tiempo. Creo que me vendrá bien porque se avecinan muchas e
interesantes competiciones en las próximas semanas y habrá que estar preparado.
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